viernes, 4 de enero de 2013

Análisis: Ralph, el Demoledor

Por Yop.



Ah, Ralph... No eres como los típicos malos del juego. Eres más como un hombre poco entendido.


Nombre original: Wreck-It Ralph
Estudio: Walt Disney Animation Studios.
Fecha original de estreno: 29 de octubre del 2012 (avant premiére)
Dirigida por: Rich Moore
Producida por: Clark Spencer

Ralph es un villano de videojuegos, específicamente, de Fix-It Felix Jr., un juego de arcade en donde el protagonista, Felix, debe, con ayuda del jugador, reparar el daño a un edificio causado por Ralph. Su vida se basa en un orden establecido: romper, intentar derribar a Felix, ser agarrado por los habitantes del edificio y ser lanzado de la azotea al fango. Una vida que ha repetido por 30 años, y que de un día a otro, no está dispuesto a seguir más, al declarar que tal vez ya no quisiera ser el villano, porque al bueno le va mejor. Sin embargo, no sabe cómo puede conseguir ser un héroe, hasta que oye hablar de una medalla de honor entregada en un juego de disparos. Sin embargo, con Ralph fuera del juego, amenazan con clausurar Fix-It Felix Jr. si es que no lo encuentran, por lo que Felix también abandona su juego para hallar a su villano. Es aquí donde comienza una aventura heroicamente malvada, donde tanto héroe como villano descubrirán no solo quiénes son, sino que aprenderán a entenderse un poco más, y otras cosas en el camino.

En su escape de Fix-It Felix Jr., Ralph da a parar a dos juegos más, que son Hero's Duty, un rail-shooter en primera persona, en donde el jugador es dirigido a lo más alto con ayuda de la Sargento Calhoun y su equipo, para conseguir una medalla de honor por su heroísmo, y Sugar Rush, un dulce juego de carreras que recuerda mucho a los juegos de Mario Kart, con poderes, paneles turbo y personajes coloridos. La aventura de Ralph lo lleva a conocer estos dos mundos y a entablar una curiosa relación con Vanellope von Schweetz, una personaje especial del juego de carreras, mientras que Felix conoce y se alía con la Sargento Calhoun de Hero's Duty, en su búsqueda por Ralph. También aprendemos nuevos términos curiosos, como "volverse Turbo", que lo entenderán al ver la película.

A lo largo y ancho del film nos encontramos con varias referencias a videojuegos reales, como Q*Bert, Sonic The Hedgehog, Super Mario Bros., Street Fighter (más referenciado), Pac-Man, Metal Gear (referencia muy especial), Dig Dug, Pong, Paperboy y Tapper, entre otras referencias menores, como al conocido código Konami.

La película es muy entretenida. Diferente a otras películas basadas en videojuegos, como esa película de Super Mario Bros. (que realmente no fue lo que esperé), Ralph, el Demoledor respeta muy bien el mundo de los juegos, siendo lo más fiel a este género. La película es apta para todo espectador, aún siendo un film basado en juegos de vídeo. Además, contiene acción, romance, nostalgia y tristeza, malentendidos, sorpresa, espanto, y un gran final. El film no deja puntos en blanco. Bueno, sólo uno. Pero ese tal vez se aclare en contenido adicional en la entrega para DVD y Blu-Ray.

Junto con alabar la película en sí, me quito el sombrero ante el espectacular equipo de doblaje al español latino. Excelentemente doblada, con voces reconocibles por el espectador, siendo Ralph doblado por Mario Gómez (Jaimico en Soy La Comadreja), Felix por Moisés Iván Mora (Rigby en Regular Show), Calhoun por Rebeca Patiño (Tronquitos en Adventure Time) y Vanellope por María Antonieta de las Nieves (los que vieron "El Chavo" se irán de espalda).

De uno a 10, califico a Ralph, el Demoledor, con un 9.5/10. Excelente película, gran banda sonora, personajes encantadores y carismáticos. Lo único sí, que deja solo un punto en blanco, que muchos aún tratan de resolver.

Ahora, si me disculpan, debo encontrar una arcade en la que pueda jugar Fix-It Felix Jr., Hero's Duty o Sugar Rush. Con permiso.

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