La gran travesía, capítulo 26.

Por Yop.

¡Feliz año nuevo! Pero antes, ¡feliz navidad, feliz kwanzaa y feliz hanukkah! ¿Y el día de la Marmota? ¡No importa!

Dicen que cuando el ímpetu ataca, el héroe debe responder con todo lo que tiene. Y por eso es que he encontrado la inspiración... en medio de mi alergia! (SERÁ IDIOTA?!)
Pero en fin, tengo que escribir algo. Ciertas personas insisten en insistirme cuándo vendrá el siguiente episodio, por lo que tengo que responderles, ¿no creen? Y como la alergia no se me quita ni con dos corticoides, mejor escribo a ver si eso ayuda.

En otras noticias, el progreso en el blog dedicado es de un chocante 0%. Como he estado descansando y jugando (para que se hagan una idea: empecé y terminé el Shovel Knight, empecé el Xenoblade Chronicles, y estoy a punto de terminar los desafíos del Smash 3DS), no he hecho absolutamente nada de este estilo. Pero he sido un pavo, aún tengo muchas cosas que contar en la historia, y aún necesito mostrarles a los personajes (en versiones mejor hechas, porque... no, mejor no).


Por cierto, todos los links del segundo libro se conectan entre ellos ahora. Lo acabo de revisar.

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"- ¿¡Y-y-y-y-y-yo?! ¿¡P-p-pue-puedo?! - ME ATERRÉ, LO SIENTO. ESTABA ATERRADO, EN VERDAD.
- Supongo... - Galodio dio un corte al aire, que creo (creo creo creo) que cortó el sonido - ... que si no quieres, mejor no.
- Ah, qué alivio... - hubiera deseado no decir eso.
- ... ¿O no? - Galodio se arremetió hacia mi, con su espada en alto, y golpeando violentamente, mientras me apresuraba en bloquearlo.
- ¡H-hey, eso es injusto! - dije, defendiéndome.
- ¡DI TODO LO QUE QUIERAS, NO CAMBIARÁ NADA! Si no eres capaz de derrotarme aquí y ahora, ¡no eres ni siquiera, NI SIQUIERA DIGNO DE PORTAR DICHA ESPADA! - dijo, o más bien, GRITÓ mientras me golpeaba.
- ¿Con que una espada, eh? - me molestó un poco que no fuera tan fijón en darse cuenta que...- Para tu información, ¡¡¡ESTO ES UN SABLE!!! - corrí violentamente a golpearlo, pero al parecer, simplemente lo animó más aún.
- ¡¡ESO, ESO!! ¡¡ESO ES PRECISAMENTE LO QUE QUIERO VER!! ¡Esa determinación en tus ojos por corregirme! ¡¡TE RETO A QUE ME DERROTES!!
- ¡Esa... esa debería ser MI LÍNEA! - grité, mientras chocaban nuestras armas.

Nuestras armas chocaron entre sí durante mucho tiempo. Tanto él como yo estábamos dando el 110% de nuestra potencia para poder pelear contra el otro. Y sin embargo, yo no podía mantenerme al mismo nivel que él, porque, después de todo, no había pegado pestaña durante toda esa noche. Pero no podía rendirme.

- ¡Muéstrame cuán grande es tu potencial, chico de fuego! - dijo, desafiándome.
- ... no me subestimes.

Retrocedí un poco para romper el sello, y luego de liberar el break, hice todo lo posible por evitar soltar todo el poder de una, y poder mantenerlo en el sable. Costó un poco, pero pude hacerlo.

- ¡Filo de Flama, Modo Contenido!

El sable irradiaba un brillo esmeralda desde el filo, y podía sentir cómo su poder presionaba sobre mis manos. Era una fuerza impresionante, contener tanto poder en el sable seguro serviría para poder darle una paliza a ese ignorante.
Luego de eso, me arremetí a darle de verdad una paliza.

El poder contenido era tan alto, que me permitía mover el sable con más rapidez y fluidez que antes, sin dejar de lado que sus cortes ahora tenían daño de fuego en ellos. Sin embargo, Galodio no era lento para bloquear o esquivar las oleadas de estocadas y cortes que daba. Chispas volaban cada vez que chocaban nuestras armas.

- ¡Seguro esto me hará ganar! - dije, preparando un golpe de gracia.

Atentos a esto.

Bloqueé un corte de Galodio, para luego empujar su espada hacia atrás, dejando un punto ciego expuesto. Luego, con ambas manos en el sable, me decidí a liberar todo el poder contenido, y dar el golpe de gracia con el break completo.

- ¡Golpe de gracia! ¡¡Filo de Flama!!

...

El golpe... lo bloqueó.

Galodio bloqueó el golpe con tal rapidez, que todo el fuego del break salió disparado por detrás de mi sable, dejándolo vacío. Y no solo eso, la energía liberada fue tal, que salí empujado hacia atrás, con sable y todo. Al final, estaba apoyado en mi sable, tratando de levantarme.

- ... aún no... llego a mi límite... - dije, pero ya me sentía tan cansado, que no podía ni moverme.
- Arriba, muévete - dijo Galodio, violento, mientras caminaba hacia mi.
- ¡Illius, retírate! - me gritó Elena, preocupada.
- ¡Señor Galodio, ya fue suficiente! ¡Deténgase! - gritó Damian.
- ... - Galodio me dio una fuerte patada en el estómago.
- ¡Ahora sí, tú...! - Cello ya se estaba preparando para saltar a defenderme, cuando lo detuvo una voz que vino de lo alto.
- ¡Hey, si te dijeron que pararas, es mejor que lo hagas! ¡Ah, y hasta rimé sin esforzarme tanto, qué gusto! - era la voz de una chica. Parecía que la hubiera escuchado antes...
- ... no molestes, estoy en medio de una pelea.
- Y-yo tod-todavía... puedo... - Galodio me dio otra patada igual, sin razón - ¡Oof!
- ¡Illius! ¡Ukt, detén a Gratonio! - olvidé mencionar que Elena no es muy buena para retener nombres...
- ES GALODIO. Pero ya que insistes... ¡Muro Gravitacional! - Ukt lanzó un muro para detener a Galodio, pero...
- Técnicas como esta me son ridículas en absoluto... - Galodio retrocedió para cortar la barrera que le impusieron, con un corte tal que la partió.
- No sé si recuerdas, pero... - la figura en lo alto disparó una flecha a Galodio. Galodio la esquivó, pero eso le dio tiempo de bajar y mostrarse. Era esa chica que rescatamos antes - ¡Te dijeron que te detuvieras!
- ¡Es Bell! - dijo Cello con asombro.
- Sorprendentemente te aprendiste su nombre muy rápido... - dijo Damian, con escepticismo.
- Cierto, ¿no? Alto, ¡no hay tiempo para eso! - dijo Cello, apresurado.

Cello y Elena se apresuraron en recogerme, antes que Galodio hiciera alguna otra cosa, y me dejaron al cuidado de Goot y Damian mientras enfrentaban a Galodio. Esto lo sé, porque... me quedé dormido en cuanto recobré mi aire de la segunda patada, y tuve que preguntarles luego sobre qué había pasado.

- ¡Eh, tú! ¡Bien sanito te crees para andar peleando tan bajo! Pues, qué crees... ¡Yo no estoy aquí para ninguna de tus idioteces, menudo imbécil! - dijo Cello.
- ¿Quién te has creído que puedes venir y hablarle así a un espadachín de categoría como yo? - Galodio se acercó a él, imponente.
- ¿Y tú? - Cello chocó su cabeza con la de Galodio, haciendo presión - ¿¡Quién demonios te crees que soy?! ¿¡Que soy de la plebe, que soy de nivel bajo?! No seas insolente, ¡¡¡Y MUESTRA TUS RESPETOS AL REY, PEDAZO DE IDIOTA!!!
- C-Cello... - dijo Elena, preocupada.
- ¡Cello, cuidado! - gritó Bell, viendo que Galodio preparaba un golpe furtivo.

Cello alcanzó a esquivarlo sin recibir daño, pero al hacerlo, le agarró la capa y se la quitó, revelando en su rostro el mismo símbolo que tenía Gargantuo en su cuello.

- ¡No puede ser! - dijo Crepatus con espanto.
- ¡El señor Galodio era un Anti-Estrella! - dijo Betank apresurado.
- ¿Anti-Estrella? - preguntaron todos los otros.
- Son una clase especializada de guerreros, con capacidad de incrementar sus poderes en un apuro, al igual que los Peleadores Estelares... No pensé que nuestro viejo compañero Galodio... sería uno de ellos - dijo Crepatus, triste.
- Y no lo soy - dijo una voz detrás de Crepatus.
- ¡¡QUÉ ANTICLIMÁTICO SALISTE, GALODIO!! - gritó Crepatus hacia el verdadero Galodio.
- Alto, si tú eres el que está aquí, ¿quién era el que peleó contra Illius? - preguntó Damian.
- ¿Ese? Ah, supongo que es un imitador - dijo Galodio, calmado.
- ¡¡Pero qué sereno!!

- Ah, supongo que ya mi fachada está derrumbada. No tiene caso pretender ser el tonto espadachín azul al cual imitaba... - su cuerpo empezó a cambiar de tono, a un color morado oscuro - Ah, al jefe Ghos no le va a gustar que yo tuve que revelar mi verdadera identidad ante un grupo de tontos como ustedes... - marcas salían de su cuerpo, mientras se liberaba el poder anti-estrella de su sello - Pero ya que están aquí, ¡¡SENTIRÁN LA IRA DEL MISMO GRADIA, MAESTRO DE LAS ARTES CORTANTES, EN PERSONA!!
- Ah, ese mismo era - dijo Galodio.
- ¡¡ME SORPRENDE LO CALMADO Y SERENO QUE ESTÁ EN UN MOMENTO ASÍ!! - dijo Damian con asombro.
- Elena, Bell, cúbranme y asístanme, por favor - pidió Cello a las chicas.
- Claro que sí, amigo - dijo Elena, sonriendo.
- D-de acuerdo, Cello... - dijo Bell, sonriendo y sonrojada.

En seguida, Gradia se arremetió contra Cello, pero fue bloqueado por los puños de Elena.

- Ya tuve suficiente con que golpearas a mi mejor amigo. ¡Ni creas que te dejaré golpear a Cello, Landia! - dijo Elena, desafiante. Y sin embargo tampoco retuvo su nombre, de nuevo.
- ¡¡Mortal estúpida, mi nombre es Gradia!! - Gradia se preparaba para dar un corte fugaz, pero un flechazo a la frente de Bell lo detuvo en seco.
- Golpear a los débiles es bajo. ¡Intentar golpear a una mujer es caer incluso más bajo aún! - le gritó Bell.
- ¡¡No necesito sermones de tontas como tú!! - Gradia cambió de objetivo para golpear a Bell, pero Cello lo detuvo en seco, congelando sus pies.
- Qué vergüenza. Primero golpeas a alguien que ya está derribado. Después revelas que eres una estafa, ¿y te vas a atacar a la arquera? Deberías sentirte un asco después de eso.
- Como si me importara. No es como que el rey de las calumnias pudiera hacer algo al respecto.

¿Saben qué? Olviden cualquier error que cometí yo hasta antes de ese punto. Gradia selló su propia tumba ahí mismo.

- Quiero escucharte decirlo otra vez.
- No es como que el rey de las calumn- no alcanzó ni a terminar de hablar, cuando Cello cortó en seco su mano zurda. Cello ya había cambiado a su forma del Rey.
- Vamos, quiero que lo digas de nuevo.
- ... Ni de broma. ¡NI DE NINGÚN MALDITO MODO ME HARÁS DECIRLO DE NUEVO! - Gradia rompió el hielo del piso que lo tenía retenido, usando su brazo bueno y su espada, y saltó hacia atrás.
- Bell, Elena, necesito su ayuda, por favor.
- ¿Ahora sí? - preguntó Elena.
- Ahora sí. Bell, ¿tienes algún problema en combate cuerpo a cuerpo?
- ¿Y-yo? L-la verdad no, sé usar esta técnica que me hace rodear a un oponente y darle un flechazo en la espalda... Y también puedo defenderme a puño y patada...
- Justo lo que hará falta. Escuchen, tal vez no sea tan buen estratega como Illius, pero este es el plan... - Cello les susurró el plan a las chicas, hasta que Gradia interrumpió.
- ¡¡Son una peste, los mataré a todos, comenzando por el rey de nada!! - Gradia se arremetió a todos.

- ¡Ahora!

Cello saltó hacia atrás para dejar que Elena no solo bloqueara el ataque de Gradia, sino que también abriera un punto ciego, y usó su Golpe de Acero en su estómago para mandarlo a volar lejos. Cello creó un muro de hielo para detener su vuelo en seco, y mientras Gradia trataba de recuperarse, Bell saltó a hacerle frente, solo para engañarlo y usar su Flechazo Evasivo, para lanzar a Gradia de vuelta hacia Cello, donde lo congeló en seco en el suelo.

- ¡¡Ja, qué es esto, una trampa!! ¡No hay manera en que puedan destruir al poderoso Gradia, ni aunque lo amarren al suelo!
- Déjame contarte dos cosas interesantes... - Cello cortó los pies de Gradia - Primero. Si hay algo que detesto, es a los insolentes, que se creen superiores por tan solo atacar a los débiles. Los odio en el alma.
- ¡¡Dícelo al infierno, rey de la nada!! - gritó Gradia con ira.
- Segundo. Y escucha con atención... Tal vez no tenga trono ni reina... - Cello le cortó el brazo bueno - Ni nadie que me comprenda... - Cello le cortó el otro brazo - Pero... - Cello saltó, con Rjodrik a su espalda, dispuesto a decapitar. Al caer, Cello le dio con todo al cuello de Gradia, decapitándolo - ¡¡¡SIGO SIENDO EL REY!!!

Gradia explotó en una onda expansiva, sin dejar rastro de él en el camino. La batalla había terminado.

- Ah, se murió - dijo Galodio.
- ¡¡INCLUSO AHORA, SIGUE SIENDO SORPRENDENTE!! - exclamó Damian, asombrado.

Al despertarme, me contaron todo lo sucedido. Me impresionó bastante la actitud de Cello en el campo de batalla, y me sorprendió saber que en realidad el peleador ese era un impostor de Galodio. Me tranquilizó saber que Damian en realidad había enfrentado a Galodio, y no a Gradia.

- Ah, pero qué alivio... Por un segundo creí que te habías enfrentado a ese loco...
- Ni de broma. No soy tan despistado como para dejar que un impostor tomara mi lugar - dijo Galodio.
- Por cierto, Bell... Gracias por ayudar a Cello y a Elena antes, y gracias por distraer a Gradia. Fuiste de gran ayuda - dije, agradecido.
- No fue nada. Cualquier cosa por ayudar a un amigo en necesidad - dijo Bell.
- Tus habilidades en batalla me impresionaron en serio, Bell. Eres una gran peleadora - dijo Cello, a lo que Bell miró hacia otro lado.
- Supongo que sí...
- ¡A-alto, señorita Bell! - dijo Elena, tímidamente.
- ¿Sí?
- Si no le molesta demasiado, ¿le gustaría unirse a nosotros en encontrar las piezas del amuleto? - dijo Elena.
- DE. NINGÚN. MODO - dijo Ukt.
- ¡Desde luego! - dijo Bell, alegre.
- ¡¡CÓMO IGNORAN MI AUTORIDAD!! - dijo Ukt, humillado.
- ¡Ah, vamos, plasmibola! ¡Entre más caras, más máscaras, y más narices significan más bigotes! - dijo Nny. Alto, ¡¿EN SERIO DIJO ESO?!
- Odio ser quien apoye al iletrado, pero es cierto, entre más somos, mejor es a la hora de pelear en grupo - dijo Goot.
- Y más caras significan más sonrisas, ¿no creen? - dije.
- Supongo que no hay problema... - dijo Ukt, casi rindiéndose.

Crepatus, Betank y Galodio se fueron, dejándonos el trozo del amuleto que tenían ellos. Nny y yo nos fuimos a dormir temprano, para reponernos bien. Sin embargo, igual me desperté en medio de la noche, solo para ver que Elena estaba durmiendo cerca mío. Me asusté un poco.

- E-Elena, ¿qué haces aquí? ¿No deberías estar en tu saco de dormir? - pregunté, sin alzar mucho la voz.
- Es que... es que... yo me preocupé mucho... y me sentí tan tonta por dejar que te golpearan... y...  y yo... - Elena estaba por romper en llanto, pero la abracé para contenerla.
- Tranquila. No me pasó nada, estoy bien. Y para serte sincero, no me habría perdonado nunca si te hubiera pasado algo por protegerme. Me importas mucho, Elena.
- T-tú también me importas mucho, Illius...
- ¿Ves, Elena? El nene está bien - dijo Cello en mal momento.
- ¿¡NO PODRÍAS HABER SIDO MENOS ANTICLIMÁTICO?! - le gritamos Elena y yo.
- Pero si el nene está bien...

Esa noche... Esa noche, Elena durmió a mi lado. Y yo la abracé fuerte, para mostrarle que jamás dejaría que algo le pasara."

<-- To be continued -- (#FeelLikeJojo)